jueves, 12 de agosto de 2010

SOBRE LA VIDA Y LA MUERTE

A veces me parece que la vida y la muerte no son mas que las dos caras de una misma moneda. Son como el mar con sus olas que llegan y parten en la orilla. Allí entregan y se entregan. Allí reciben de la playa los tesoros que ella tiene para dar. Finalmente las olas parten una vez mas hacia el mar, hacia su inmensidad, y se mezclan con el todo. Parten para volver a casa, al lugar del cual vinieron.

Nosotros también un día partimos hacia la vida para dar y recibir y a medida que vamos marcando nuestra huella, la vida nos va dando sus tesoros de sabiduría, experiencia y aprendizaje.

Nuestra alma lleva dos alforjas. Una para dar y otra para recibir y cuanto mas vaciamos la una, mas se llena la otra.

Finalmente un día partimos con nuestra alforja de recibir repleta de tesoros de sabiduría para retornar al mar de la inmensidad, a casa.

Nunca estamos solos. Ni en la vida, donde somos recibidos por alguien que está dispuesto a acompañarnos y a protegernos, ni en la muerte, donde siempre nos esperan nuestros Maestros.

Cada vez que pude revivir una muerte en vidas pasadas mediante una regresión, no hice mas que comprender que la muerte es sólo una experiencia dentro de la vida inmortal de mi alma.

A veces morir era un suave dejarse ir, lleno de luz y con una infinita paz. Otras veces la muerte sobrevino como el final de una experiencia traumática, llena de dolor y miedo, hasta que mi alma se despojaba lentamente de mi cuerpo como quitándose una ropa vieja y gastada.

Lo maravilloso es que no importa lo que yo fui en esas vidas. Si morí lleno de culpa, odio, confusión, desilusión o cualquier otro sentimiento negativo. Mas allá de todas las circunstancias, siempre estaba esperándome la luz, iluminando el camino a casa.

Finalmente comprendí que morir es sólo quitarse un disfraz para dejar al descubierto la magnificencia del Alma.

La muerte es la que le da sentido a la vida y también es la liberación de las ataduras impuestas por el plano material. La vida es la escuela en la que aprendemos y hay que venir a clases porque sólo aquí podemos vivenciar físicamente lo que en teoría ya sabemos.

Para que ya no le temamos a la muerte, para que nadie quede atrapado en la confusión, deseo que comprendas que morir es solamente volver a casa